santo evangelio de nuestro señor jesucristo según san lucas. ¡gloria a ti, cristo señor!
Jesús siguió su camino
y
llegó a una aldea,
donde
una mujer llamada Marta lo hospedó.
Marta tenía una hermana llamada María,
la
cual se sentó a los pies de Jesús
para
escuchar lo que él decía.
Pero Marta,
que
estaba atareada con sus muchos quehaceres,
se
acercó a Jesús y le dijo:
—Señor,
¿no
te preocupa nada que mi hermana me deje sola
con
todo el trabajo?
Dile
que me ayude.
Pero Jesús le contestó:
—Marta,
Marta,
estás
preocupada
y
te inquietas por demasiadas cosas,
pero
sólo una cosa es necesaria.
María
ha escogido la mejor parte,
y
nadie se la va a quitar.
el evangelio
del señor.
te alabamos,
cristo señor.
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hoy es el día. es el honor de tu vida. tu maestro y amigo viene de visita! tú le invitaste a él y dijo que sí. ahora tienes que preparar la casa. limpias todos los cuartos, arreglas
todas las cosas adentro y afuera. te vistes de ropa buena. y cocinas una abundancia de comida – un banquete. todo el día trabajas.
de repente—aquí está! todavía
tienes muchos quehaceres, entonces le das un bienvenido y lo dejes en la sala
de estar. sigues preparando la
casa y la comida, cuando te da cuenta de que tu hermana paró en ayudarte. ya no te ayuda con los quehaceres. en vez de ayudarte, ella se sienta a los
pies de jesús y no hace nada.
¡no es posible! necesitas su
ayuda con todos los quehaceres! ¿por
qué piensa ella que puede dejar todo para ti? y le dices precisamente esto a jesús para que él le diga a
ella que te ayude.
pero él te dice que no. no
va a decirle que tiene que ayudarte.
pero todo que hiciste fue precisamente para él! preparando, limpiando, arreglando—todo! entiende que todo que hiciste es para él,
pero dice que ahora que está aquí, es más importante estar con él que
siga preparando para él.
sólo una cosa es necesaria. y es sentarse y escuchar a jesús—ser presente
con él. la casa está bien, la
comida será bien y jesús sólo estará aquí poco tiempo más. tú le invitaste a él, él te dijo a ti
que sí, claro. quiere pasar tiempo
junto contigo, no simplemente en tu hogar.
estás distraída y sólo una cosa es necesaria: prestar atención a jesús. tienes tiempo para las otras cosas,
pero sin prestar atención a jesús, nada tiene sentido. la comida sin huésped es una pérdida. una casa limpia sin gente para llenarla
no tiene ninguna función. estás
aquí para ser con jesús.
nosotrxs estamos aquí en la iglesia de san pablo también para ser con jesús.
cuando preparo para los domingos, es muy fácil ser distraída por cómo
hacer la liturgia, cómo cantar, para qué orar, cómo predicar, y
a veces se me olvida que sólo una cosa es necesaria. cuando vengo aquí a la iglesia san pablo, puede ser una
lucha para mi ser presente durante la misa porque en la iglesia immanuel,
hacemos algunas cosas de manera distinta, entonces tengo que acostumbrarme a
como las haremos aquí. significa
que por mi parte, tengo que admitir que no haré todas mis partes precisamente
como “hay que” hacerlas, pero los haré lo mejor posible cuando todavía adoro a
dios.
yo tengo que recordar que yo estoy aquí para adorar a dios. es difícil y—como marta—a veces se me
olvida por qué estoy aquí. pero en
todo esto, la verdad es que sólo una cosa es necesario.
estamos aquí para adorar a dios.
estamos aquí para oír la buena noticia que por la gracia y el amor de
dios, nuestros pecados son perdonados.
estamos aquí para recibir la gracia de dios en el pan y en el vino – la
santa comunión – el cuerpo de cristo y la sangre de cristo dado por cada una y
cada uno de nosotrxs.
cantamos y oremos y tenemos velas y recibimos la ofrenda. y todas estas cosas son buenas e
importantes, pero cuando somos distraidxs por esas cosas no podemos enfocarnos
en recibir la gracia de dios o en darle gracias a dios por su amor y por nuestras
vidas. cuando somos distraídxs, faltamos
la única cosa más importante en la misa – jesucristo nuestro señor.
cuando yo estaba en la universidad, trabajé coordinando la gente que
voluntó para la misa cada domingo.
ellxs llegaron temprano y revisamos todo que tuvimos que hacer durante
la misa y como hacerlo. al fin,
cada semana, les dije a lxs voluntarixs, “recuerdense que estamos aquí para adorar. tenemos cosas especificas para hacer,
pero si los hacemos de manera incorecta, está bien, por que dios todavía nos
ama y es más importante adorar a dios que hacerlo precisamente perfecto.”
es lo mismo con cada unx de nosotros, cuando reunimos, nunca es perfecto,
pero siempre está jesús con nosotrxs.
siempre recibimos la gracia y el amor de dios.
cuando estamos en la iglesia, es muy fácil olvidar por qué estamos aquí. al preparar para predicar hoy, se me
olvidó como se dice la palabra “worship” en español. cuando lo busqué y lo traduje, me di cuenta de que adorar y
adoración son palabras perfectas!
cuando reunimos aquí los domingos, reunimos para adorar a dios. todo que hacemos aquí es para dios.
la semana pasada oímos sobre el hombre de samaria y al principio el maestro
de la ley pregunta ¿qué necesito hacer para alcanzar la vida eterna? y jesús le
responde con la pregunta ¿qué está escrito en la ley? él le contesta, "ama al señor tu dios con todo tu corazón,
con toda tu alma, con todas tus fuerzas y con toda tu mente y ama a tu prójimo
como a ti mismo."
los domingos esto es precisamente lo que hacemos.
reunimos con nuestros cuerpos y recibimos la santa comunión, amamos a
dios con todas nuestras fuerzas;
adoramos con oraciones, amamos a dios con todos nuestros corazones;
oímos lecturas, amamos a dios con todas nuestras mentes;
y siendo presente, amamos a dios con todas nuestras almas.
y cuando recibimos la ofrenda, amamos a dios y también a nuestrxs prójimxs porque el dinero va a ayudar a la iglesia y el programa que da comida a gente que la necesita.
adoramos con oraciones, amamos a dios con todos nuestros corazones;
oímos lecturas, amamos a dios con todas nuestras mentes;
y siendo presente, amamos a dios con todas nuestras almas.
y cuando recibimos la ofrenda, amamos a dios y también a nuestrxs prójimxs porque el dinero va a ayudar a la iglesia y el programa que da comida a gente que la necesita.
estamos aquí para adorar a dios y lo adoramos mejor cuando no estamos
distraídxs por nada. cuando no enfocamos
demasiado en doblar a la derecha o a la izquierda empezar enfrente o detrás—podemos
enfocarnos en cómo lo que hacemos da gloria a dios, cómo demostramos el amor de
dios, reflejándolo a dios y a nuestrxs prójimxs. cuando esto es nuestra tarea, nuestro enfoque, no hay que
preocuparse demasiado por el resto.
